La Asociación de Criadores de Ganado Porcino Celta fue reconocida por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente para el empleo del logotipo “100% Raza Autóctona Celta”. Es la primera raza porcina española acreditada para la utilización de este distintivo de calidad que sólo podrá ser empleado en los productos que se describen en el pliego de condiciones y por operadores autorizados.

Este logotipo es un sello oficial que identifica los productos procedentes de animales de razas autóctonas españolas, y que garantiza a los consumidores el origen de los productos que adquieren bajo esta denominación.

Está regulado en el RD 505/2013 de 28 de Junio, por el que se regula el empleo del logotipo en los productos de origen animal.

El desarrollo de esta normativa se recoge en el pliego de condiciones para el uso del logotipo “100% Raza Autóctona” para los productos del cerdo Celta.

Esta marca garantiza la pureza de la raza y la cría artesanal al aire libre. De forma que los consumidores reconozcan el origen y contribuyan a que la raza no se extinga consumiendo sus productos y apreciando sus cualidades.

La agrupación racial cética se extendió en mayor o menor medida por el Norte y Noroeste de España dando lugar a distintas razas, hoy más o menos cruzadas, como el Cerdo Chato de Victoria, el Lermeño de Burgos, el Catalán de Vich, el Molinés de Guadalajara, el Alistano e Zamora, la gallega o Celta, y otras también por Centroeuropa y Portugal. Muchas de ellas están hoy desaparecidas.

Esta raza celta era la más importante en Galicia hasta comienzos del pasado siglo XX, sufriendo a partir de entonces una continua reducción censal ocasionada por la importación de razas foráneas y por el cruce con éstas, para obtener mayores rendimientos cárnicos y menores tiempos de cebado. Así en el año 1951 tan sólo un 14% del total era de la raza Celta para llegar posteriormente a casi la desaparición en la década de los ochenta.

En la actualidad, es una raza incluida en el Catálogo oficial de Razas de Ganado de España como raza autóctona española en peligro de extinción (RD 2129/2008 de 26 de diciembre, por el que se establece el Programa nacional de conservación, mejora y fomento de las razas ganaderas).

Sin embargo, vestigio de que la raza fue en una época la predominante en las cuadras y ferias gallegas, aún quedaban muchas familias salpicadas por las zonas rurales de Galicia que solían criar cerdos de esta raza, debido principalmente a la mayor calidad y suculencia de su carne y productos derivados.

Así fue como, a pesar de que ya no se catalogaban, se fueron manteniendo algunos ejemplares aislados en diferentes reductos de la Comunidad, que supusieron los principales cimientos para la recuperación de la raza a finales de los años noventa.

Actualmente la raza porcina celta está morfotípicamente bien definida y socialmente reconocida por su calidad cárnica.

Vídeo elaborado por Transmedia